ESTUDIOS Y TRABAJO
A veces se hace complicado tener una continuidad cuando estás estudiando o trabajando a causa de los episodios, tanto depresivos como maníacos, pero no es imposible conseguir un equilibrio y poder llevarlos a cabo. Para mí la clave es detectar los primeros síntomas y actuar en seguida para poder volver a la rutina. Aunque hay que comprender que en ciertas ocasiones donde los episodios son más graves hay que tomarse una pausa y continuar más adelante. Voy a contar mi experiencia por si le sirve a alguien. Empecé la universidad con 18 años. Estudié enfermería, que era y es lo que me gusta. En primer curso suspendí dos asignaturas y me tocó recuperarlas en septiembre. Ese verano tuve mi primer episodio depresivo. No quería salir, me encontraba fatal, quería dejar los estudios, no quería ni ducharme, iba todo el día en pijama. Mis padres no sabían qué pasaba. Para mitad de verano mejoré y llegó septiembre y aprobé esas dos asignaturas con buena nota. A partir de ahí empecé a tener alt...